Responder a las necesidades del pueblo colombiano ha sido la consigna del gobierno del presidente Iván Duque desde el día en que llegó a la Casa de Nariño. La primera mitad de su gobierno ha estado marcada por cumplir sus promesas de campaña y lo contenido en el plan nacional de desarrollo; hacer presencia en todo el territorio nacional con los exitosos talleres Construyendo País; frenar la criminalidad del narcotráfico y guerrilla, y la muerte de líderes y mujeres; y, lidiar con la rabia de la oposición que le anunciaron desde el día en que ganó que se mantendrían en las calles, y lo han cumplido con una marcha cada dos días hasta que llegó el aislamiento obligatorio. Más recientemente, en estos últimos cinco meses, el presidente y su gobierno han orientado todas las energías y horas de trabajo al manejo de la pandemia por el COVID-19, para frenar el contagio y dar soluciones a sus inesperados y adversos efectos sobre la salud, el empleo, las condiciones de vida de los ciudadanos y la actividad productiva.
Dando continuidad a la columna de la semana pasada, hoy quiero resaltar tres logros legislativos como la aprobación de la prisión perpetua para violadores, propuesta de campaña del jefe de Estado, con la que se asegura justicia para las víctimas y no impunidad para quienes asesinaron o violaron menores de edad. Así mismo, destaco la sanción de la Ley de Pliegos Tipo, que puso fin a la contratación a dedo, regulando los procesos de contratación pública, lo que ayudará a combatir el flagelo de la corrupción. A las anteriores se suma una muy especial, la Ley del Veterano, la cual rinde homenaje a esos héroes de nuestras Fuerzas Militares y de Policía que dejaron todo en el campo de batalla por defender a esta Patria. Entre los beneficios estará el aumento en la pensión para aquellos que quedaron en situación de invalidez por acciones directas de la violencia y la defensa de la soberanía de nuestro país.
Para contribuir al desarrollo regional y la focalización de los recursos de regalías, se aprobó otra de sus propuestas de campaña: la reforma al Sistema de Regalías. Con ella se permite aumentar los recursos para las regiones productoras del 11% al 25%, e incrementar los recursos para los municipios más vulnerables. Igualmente, en 2018 se aprobó el Presupuesto Bienal de Regalías 2019 -2020, por $24.2 billones, 67% superior al anterior.
En materia ambiental hay importantes resultados. Desde agosto de 2018 a la fecha, han sido sembrados 34.7 millones de árboles en el país, de una meta del gobierno de 180 millones de árboles nativos sembrados a 2022, restaurando cerca de 300.000 hectáreas. En esa línea resalto la reducción del 10% en la deforestación y el incremento del 30% en el número de áreas naturales protegidas.
No puedo dejar de mencionar algunos logros en el sector salud. En este gobierno se puso en marcha el Acuerdo de Punto Final, el cual ya está saneando deudas históricas que existen entre los agentes del sector para garantizar el financiamiento del sistema y generar mayor liquidez. Así mismo, las autoridades regularon el precio de 770 medicamentos, lo que permitió un ahorro estimado de $340 mil millones al sistema se salud. Y, finalmente, debo ponderar el mejoramiento en la infraestructura, dotación y saneamiento financiero de hospitales públicos del país, maratónica labor en la que han sido invertidos $348 mil millones, y $340.000 millones para saldar deudas de hospitales públicos con sus trabajadores. Sin duda son muchos los retos en esta materia, pero hay avances positivos que pueden medirse en la atención y respuesta a la emergencia que vive actualmente nuestro país, como consecuencia del Covid-19.
En este escenario de pandemia también hemos podido visibilizar la gran importancia de la ciencia. La creación del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación ha sido clave para estudiar el comportamiento del coronavirus, avanzar en investigaciones que permitan acercarnos a una vacuna, e incluso, apoyar proyectos orientados a dar soluciones en torno al diagnóstico, tratamiento y monitoreo del virus. Sin duda, un gran y necesario aporte.
No puedo terminar esta columna sin hablar de esa disciplina que tantas alegrías nos da y que logra unir de forma única y sana a todo un país: el deporte. En esa materia quiero destacar no solo la creación del ministerio, sino el importante incremento en el presupuesto para el sector de 35%, alcanzando a $676 mil millones en 2020.
Es cierto que falta mucho y que quizás sin la intempestiva llegada de un virus que cambió abruptamente las prioridades de trabajo del Gobierno Nacional, los logros serían muchos más. Pero el mejor indicador del buen trabajo del gobierno es el manejo serio, oportuno y eficaz que ha hecho de la pandemia. Gracias a ello se ha podido mejorar la infraestructura y atención del sistema de salud; orientar recursos y ayudas directas a los más vulnerables; financiar un porcentaje de las nóminas para retener el empleo; apoyar a las micro, pequeñas y medianas empresas, e interiorizar la cultura de la prevención y el autocuidado.
Reitero que tener un presidente trabajador, sensible a la realidad de los colombianos, honesto y con la brillantez para abordar los retos inmediatos como anticipar los mediatos, da tranquilidad y confianza de que, para el segundo tiempo de su mandato, los resultados serán aún mejores.
¡Adelante presidente!